Hemos recorrido los caminos que recorren estas dos joyas naturales de nuestra provincia. La ruta la hemos realizado el día 16 de marzo de 2013, los ruteros Borja Gómez, Javier Delagos y Mikel Gómez. A continuación detallamos en detalle esta ruta.
El recorrido comienza en la ermita de Santa Cecilia en el pueblo de Santibáñez del Val, esta ermita es uno de los pocos vestigios de la arquitectura mozárabe que se conservan en Burgos.
Esta ermita es una interesante muestra del primer arte de repoblación en la provincia de Burgos, menos monumental que el mozárabe leonés y de un espíritu diferente, quizá debido a tratarse de una zona mucho más expuesta a los ataques árabes ( En un cartel cercano aparece recogido que esta zona fue objeto de las incursiones del famoso Almanzor) . Sin duda alguna poder ver tal pedazo de nuestra historia en tan buen estado de conservación ya merece el viaje que hemos realizado para hacer esta ruta.
El camino que tomamos es una pista forestal que va paralela al río Mataviejas, un pequeño arroyo que en el día que hemos realizado la ruta bajaba con buen caudal, (ha que decir que la totalidad de la ruta la hemos realizado bajo la lluvia, y por tramos con una niebla que creaba espectaculares paisajes).
Tras recorrer un par de kilómetros por esta pista forestal llegamos a una carretera, la cuál tomamos hasta llegar al famoso desfiladero de la Yecla, uno de los espectáculos naturales mas sorprendetes de la geografía burgalesa y que no damos todo el valor que se merece.
Este famoso paraje es una profunda y estrecha garganta formada por el arroyo del Cauce -afluente del Mataviejas-, que durante millones de años ha erosionado un espeso banco de calizas. En 1934 se construyeron una serie de puentes y pasarelas, que permiten recorrer el desfiladero en un paseo inolvidable, donde cada rincón merece una foto, además en esta época del año baja crecido, pudiendo observarse cascadas a lo largo de todo el recorrido, asi como todo el agua de la montaña filtrándose por cada resquicio.
En lo alto de La Yecla ha aparecido un castro, que estuvo habitado desde la primera Edad del Hierro hasta la época tardorromana y visigoda.Las aves son las protagonistas de la fauna del estrecho cañón; varias decenas de parejas de buitres leonados, junto con halcones, y cernícalos componen el hábitat de esta zona.
Lo dicho, tras recorrer estos cerca de 500 metros de desfiladero me reafirmo en que no hay que viajar a paises exóticos para poder ver verdaderas maravillas de la naturaleza.
Una vez recorrido este desfiladero nos dirigimos dirección a Hinojar de Cervera, parallegar a este pueblo lo mejor es recorrer 200 metros por la carretera y a la altura de una parada de autobús ( en mitad de la nada), coger un camino a la derecha.Desde aquí obtenemos unas magníficas vistas de las impresionantes formaciones rocosas de Cervera, que dan cobijo a decenas de parejas de buitre leonado y otras
grandes rapaces.
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El bonito pueblecito de Hinojar está rodeado de un paisaje de grandiosa belleza.Algo curioso de este pueblo y que he leido en su página web es el llamado 'bartolo', un muñeco de trapo relleno de petardos, cohetes y bengalas que hará explosión por la noche, el día de las fiestas grandes.En la iglesia de este pueblo pueden tocarse las campanas, para anunciar nuestra llegada.
Una vez atravesado el pueblo ascendemos por un camino hasta las alturas de las Peñas de Cervera -llamadas así por la abundancias de ciervos que vivieron aquí en otras épocas-, aún encuentran refugio algunos mamíferos como el jabalí, el zorro, la gineta y la liebre. El paisaje es impresionante, se pueden ver ambos valles desde su cima.
Tras la ascensión toca un prologando descenso que nos viene de maravilla para soltar piernas hacie el pueblo de Barriosuso, donde apenas se observan casas abiertas en esta época del año.
Desde aquí las perspectivas de la zona son también inmejorables, al fondo divisamos la sierra de las Mamblas -con su característico relieve con forma de pecho-, y la importante mesa de Carazo con sus cerca de 1.500 metros de altitud.
Desde aquí seguimos la carretera (sin ningún tipo de tráfico ya que termina en esta aldea) hasta donde hemos dejado el coche.En definitiva, una de las rutas mas recomendables de la provincia, y con poca dificultad para realizarla.Datos útiles
Época recomendable: todo el año.
Dificultad: media.
Distancia y tiempo: 13 kilómetros y cuatro horas.Interés: Paisaje y
arqueología.
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